jueves, 29 de agosto de 2013

No has llegado


Quisiera caer a tus pies, derretido por tu misterio, anonadado por tu esencia, sumido en el mas dulce letargo. Quisiera mirarte tan solo por mirarte, indagar tus poros y repetir tus palabras en las mías. Quisiera ser tus razones, tus seguridades, tus pupilas, habitar las esquinas de tu piel y caminar con las manos enredadas en las tuyas llenos de dudas y cansados de certezas. Quisiera saborear la dulzura que irradias, contar las sonrisas que emanas, mirarte hasta que el tiempo se canse, besarte sabiendo que eres la única dueña de mis besos. Quisiera hacer de tus frases mi nueva religión, de cada verso tuyo mi mejor canción, llenarme de tu misterio y hacerlo mi única explicación. Quisiera que tus dedos taparan el sol en mis ojos, que la noche nos pidiera permiso para partir, y el sol fuera cómplice al salir. Quisiera llenar con tu nombre cien años más de diarios, llorar contigo y cansarnos de reír, vernos crecer, vernos morir. Quisiera a tu lado ser un tonto sin remedio, perfeccionar mi cursilería, mi culinaria y mi don frustrado de comediante. Escribir simple, comer mucho, volverme perezoso y cuidar cada sueño tuyo. Roncar a tu lado, llegar tarde al trabajo, que seas mi mejor excusa, que el mundo sepa que eres mía, mi razón mas profunda, mi entrada y mi salida. Quisiera abrir los ojos y ver los tuyos cerrados, justo ahí, tendida a mi lado. Pero no se quien eres, no te sospecho, hoy soy solo yo, pues no te conozco y aun no has llegado.

domingo, 4 de agosto de 2013

Estar vivo

Respira el alma cuando nadie la escucha, palpita el corazón cuando es anónimo, piensa la razón cuando se distraen los tabúes. Sinfonía de voces ocultas, matemática de la imprecisión, el arte de habitar los vacíos que nadie ve, que esconden todo. Vuela un fantasma hecho canción por el aire de un recinto oscuro, dejando tejido a su paso una cola de luz tan brillante que retumba en los oídos. Es la voz oculta tras la simplicidad de lo imperceptible, el deleite de un paladar que saborea momentos. Una nostalgia sin razón que se llena de imposibles planeados. El resumen de los días agotados, la memoria de quien solo sabe olvidar y lo disfruta. Ese momento entre lo que fue y lo que nunca será, ese minuto presente postulado a la indiferencia cotidiana de la mañana. Ese vaivén de sonidos que lo explica todo sin malgastar una sola palabra. Es el ahora, que escribe sin dudas, todo lo calma y la vida solo escucha. Regálame un silencio y saborea mis versos, no tienen sentido si no lo has sentido, es retar la muerte, es estar vivo.