Tomo vino por que al tomarlo se desvanece el mundo que ven mis ojos y aparece el mundo que anhela mi alma. Tomo vino por que anestesia las dudas y acaricia la creatividad. Tomo vino por que el mundo esta demasiado incoherente y la cordura se ha convertido en un lapso efímero de ebriedad. Tomo vino por que me recuerda que estoy vivo en un mundo abrumado por la cotidianidad. Tomo vino por que soy débil, lo tomo por que soy bohemio, lo tomo por tributo a la juventud, por lascivo, por errático por perdido. Tomo vino por que al cerrar los ojos siento el universo ideal y no la locura real del mundo actual. Tomo vino y siempre tomaré por que es mi oasis, es mi ambrosía, mi elixir y mi tranquilidad. Y tu, que estas esperando para en tu etéreo sorbo de vino, encontrar tu verdad?