"Los dedos reposan sobre las letras de un teclado, justo antes que digiten grafemas al mundo de millones de pixeles que aguardan en la pantalla del ordenador. Allí, se contornearán para bautizarse como formas entendibles, que hace una milésima de segundo eran solo impulsos eléctricos de la razón aturdida por el flujo sanguíneo de un corazón estimulado. Así, nacen las letras en la era digital y después con un poco de atracción entre ellas mismas nacerán también las palabras. Es tan fascinante solo imaginarme que de la mente a la pantalla hay menos tiempo que lo que dura un parpadeo, que mientras sostengo un suspiro en mi pecho pudieran fácilmente agruparse veinte letras o mas en nuevas palabras. Y mas fascinante aun es saber que en tan solo unos minutos las frases de un alma solitaria que se escriben en lo intimo de su habitación podrán convertirse en una rama mas del árbol de megabytes del universo contemporáneo. No es acaso alucinante? algo así como disparar sangre pura del corazón a lo absoluto del mundo externo, al lugar donde todos habitan, un tipo de comunismo de los sentimientos, una forma de democracia de las palabras, un estado de monarquía de los poetas, una manera de anarquismo de quien simplemente tiene algo que decir. Los dedos ya no reposan sobre las letras del teclado, ahora son gimnastas seducidos por el fuego, son bailarines de poesía sobre el hielo. Es como un acto de magia saber que el mundo cambia, y esto asusta y también encanta pero mas que nada libera para mi esta noche lo mas profundo del alma."
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