miércoles, 29 de octubre de 2014

Cuando mis pies rozan el pavimento de nubes de hule que colinda con las estrellas, es cuando la gravedad misma se convierte en un  chiste de los terrenales, cuando los pesos son inversos y las alturas son el punto de partida de los nuevos infinitos. Allí escapa mi alma y respira, sin verdugos, sin paradigmas, como la noción misma de la libertad pura, pero en una realidad divina. Despegarme de las nociones del hombre, en el mas allá sin nombre, que solo los locos podrían describir exactamente, es el sentimiento puro de romper las cadenas de las preocupaciones, es volar y danzar en el viento. Es dialogar con la inmensidad sentados viendo un horizonte perfecto, de la mano de una calma eterna que no existe en los lugares sin magia, se siente como una pasantía, un salvoconducto del alma para ser absoluto y ,en unos minutos privilegiados, sentir eternamente la ambrosía servida en el comedor de mi propia vida.

sábado, 18 de octubre de 2014

Desmembrado y aislado, dormido y aturdido, como parte oculta de la luz, embriagado de presentes recurrentes, sombrío y despistado, así transcurre el incesante hastío. Es como recitar de memoria cada callejón y repetir las encrucijadas sin errores autobiográficos, es caminar pasos prestados y  sonreír por costumbre, es saborear el vacío y  resucitar con un nuevo nombre, es la inercia de los que no pertenecen, es la eternidad resumida, es ahogar el llanto y aprender las cartas sin que haya partida. Me colé en la foto insípida de los efímeros, me cansé de dar concejos a los sordos del alma, me inventé un abecedario de letras ilógicas, que uso como pretexto para alcahuetear mi locura. Vivo entre lo cotidiano que me condena y aquella incertidumbre rebelde de los días sin dueño que añoro convertir en mi vida, al ritmo de cada frase prohibida, al compás de cada grito suicida.

domingo, 12 de octubre de 2014

Esta larga espera

Aguardando meticulosamente, con la mirada detenida en el aire, los pies un metro encima de la tierra, con el rigor de aquel que sabe esperar un soplo divino tal vez, un movimiento telúrico, una ráfaga de un yo no se que. Silente, meditabundo, como hilando segundos entre los dedos. Culpable o inocente por la interminable espera, nadie entiende mi vigilia, nadie sabe mi quimera. Tic tac, tic tac y llega el momento, es mío y solo mío; solo tendré un testigo que lo sepa, un cómplice y confidente que conozca el final de esta larga espera.

jueves, 9 de octubre de 2014

Mientras cae la lluvia

Mientras cae la lluvia en un cielo tormentoso, se derriten las gotas de amor, como líneas de chocolate en un mantecado de sueños, al compás de cada palabra que se escribió con esperanza. Mientras cae la lluvia los miedos ya no son fantasmas, se juegan un duelo con el viento habitando el terreno antes esquivo de las realidades del amor. Mientras cae la lluvia el mañana parece un espejo del pasado que se detiene perplejo ante un dejavu de incomprensión. Mientras cae la lluvia la vida continua, unos ojos lloran, otros aguardan, pero sin duda queda la calle mojada en el pavimento del corazón.

lunes, 6 de octubre de 2014

Resulta

Resulta que detenerse es a veces tomar impulso para volar mas lejos, resulta que esperar es pensar mas profundo y sentir más intenso. Resulta que cerrar los ojos es ver el infinito más allá de los ojos del miedo, resulta que madurar es la mejor forma de no volverse viejo. Resulta que una palabra añeja tiene el impacto de un vino perfecto, resulta que la magia en gotas exalta la pureza de un mundo etéreo. Resulta que si no me has leído no es por que no estoy escribiendo, es solo que estaba esperando el momento justo; y en una noche sin nombre; el verso más perfecto.